La fotografía de recién nacidos y mi manera de verla

Acabáis de tener un hijo y las emociones están a flor de piel. Es un momento único y pasará más rápido de lo que os podéis imaginar. A través de la fotografía de recién nacidos os ofrezco crear imágenes que os hagan revivir este momento una y otra vez y que el día de mañana lo podáis hacer junto a vuestro hijo. Estas fotografías contarán la historia de vuestra familia, por eso son tan importantes. ¿Cómo queréis que sean las fotos que vea vuestro hijo o hija el día de mañana? Ahora voy a explicaros cómo planteo yo las sesiones de fotografía de recién nacidos.

Si algo me he dado cuenta como madre, y he podido constatar también con mi experiencia con recién nacidos, es que cuando nacemos ya venimos con nuestra personalidad “de fábrica”. No hay dos niños iguales, cada uno tiene su carácter, algunos más tranquilos, otros más despiertos. De la misma manera cada uno tiene sus preferencias para estar cómodo, y a veces la manera en la que han estado colocados durante el embarazo también les predispone a una postura u otra. Es por ello que no hay dos sesiones de recién nacido iguales. El ritmo de la sesión se adaptará a sus necesidades y siempre estoy atenta a las peculiaridades de cada bebé para adaptar las posiciones a sus preferencias y posibilidades. Más que intentar seguir un listado de poses y fotografías “cliché” me centraré en captar todos esos rasgos físicos y de personalidad que hacen de él una persona única.

Mi visión de la fotografía de recién nacidos se puede definir como natural, o lo que algunos llaman “orgánico”. Me fascina el período del embarazo y trato de recrear en mis fotografías posturas que nos evoquen la que era su vida intrauterina hace tan sólo unos días. A los bebés de apenas una semana de vida les gusta adoptar estas posturas y para ellos es algo natural y les da seguridad.

Si es posible me gusta recrear también estas posturas en las manos de su padre o madre, o mientras le abrazan, como un símbolo de que en la vida este abrazo es la continuación del entorno que le aporta seguridad y protección una vez que sale del interior del cuerpo de su madre.

En mis sesiones también hay lugar para poses más elaboradas, en especial las que permiten que podamos ver todos los detalles del bebé. Me gustan las imágenes que transmiten serenidad y es que observar cómo duerme un bebé es algo que siempre me ha llenado de paz y optimismo.

A veces utilizo fulares, mantas o incluso algún gorro o diadema pero siempre busco conseguir imágenes finales sencillas donde el auténtico protagonista sea el bebé. Para ello me centro en jugar con la luz y la composición y no hace falta grandes “atrezzos”.

Y por supuesto más allá de las fotografías durmiendo podemos conseguir fotografías también en momentos en los que está despierto. Bostezos, muecas…Gestos que nos hacen sonreír. Con bebés tan pequeños es muy difícil que puedan fijar la mirada pero si en algún momento lo consiguen y les captamos su atención se pueden conseguir fotografías con mucha fuerza.

En mi fotografía el blanco y negro tiene un gran protagonismo. Creo que dota a las imágenes de atemporalidad y mucha fuerza permitiendo centrarnos más en lo esencial. Por ello siempre procuro incluir fotografías macro de detalles. Como madre sé que nos deleitamos estudiando cada pequeño detalle de nuestros hijos, intentando retenerlo en la memoria porque cada día cambian delante de nuestros ojos. Algunas de estas características perduran en el tiempo y es muy gracioso ver que estaban allí desde los primeros días.

Y no hay sesión completa si no hay fotos con los padres y hermanos, bajo mi punto de vista.

Las madres a veces nos preocupamos por no estar “en nuestro mejor momento” y la mayoría de padres generalmente consideran que “no son mucho de fotos”. Pero captar estos primeros momentos de vuestra vida como una familia, las miradas entre vosotros, momentos íntimos durante la lactancia o la felicidad y orgullo en vuestras caras…es algo que no tiene precio y que querréis conservar y compartir con vuestros hijos.

No os voy a pedir que hagáis poses complicadas ni nada del otro mundo. A veces simplemente basta sostener a vuestro hijo y abrazarlo, o interactuar con él si está despierto. Si sois padres primerizos y os sentís un poco inseguros al cogerlo os ayudaré, pero ya veréis que una vez lo tenéis en vuestros brazos el resto fluye sólo…

Si queréis que las fotos que os recuerden cómo fueron los primeros días de vida de vuestro hijo sean como las que habéis visto aquí será un honor ser testigo de estos momentos y ser vuestra fotógrafa.

¿Hablamos?